Cómo evitar desarrollar várices

Las várices, esas venas hinchadas y de color azulado o morado que suelen aparecer en las piernas, son más que un problema estético: pueden generar molestias, dolor e incluso complicaciones médicas si no se tratan adecuadamente. Aunque algunas personas son más propensas a desarrollarlas por factores genéticos, existen muchas maneras de prevenir o retrasar su aparición adoptando hábitos saludables y prestando atención al estilo de vida.


¿Qué son las várices y por qué aparecen?

Las várices se forman cuando las válvulas de las venas no funcionan correctamente y la sangre, en lugar de seguir su camino hacia el corazón, se acumula en las venas de las piernas, haciéndolas más grandes y visibles. Las venas más afectadas son las superficiales, y su dilatación puede producir sensación de pesadez, ardor, calambres o picazón.

Algunos factores que aumentan el riesgo de desarrollar várices incluyen:

  • Predisposición genética (familiares con várices)
  • Embarazo
  • Sobrepeso u obesidad
  • Pasar muchas horas de pie o sentado
  • Falta de ejercicio
  • Envejecimiento
  • Uso prolongado de tacones altos o ropa ajustada


Hábitos y recomendaciones para prevenir várices

Aunque no siempre se pueden evitar por completo, sí es posible reducir considerablemente el riesgo de desarrollar várices o retrasar su aparición siguiendo los siguientes consejos:

1. Mantenga una rutina de ejercicio regular

La actividad física favorece la circulación sanguínea, fortalece las piernas y estimula el retorno venoso. No es necesario realizar ejercicios intensos: caminar, nadar, montar bicicleta o hacer yoga son actividades ideales para activar las piernas y mejorar el flujo sanguíneo.

Consejo: Trate de caminar al menos 30 minutos al día. Si trabaja sentado o de pie por mucho tiempo, intente mover los tobillos, estirar las piernas o caminar unos minutos cada hora.

2. Evite estar mucho tiempo de pie o sentado

La falta de movimiento impide que la sangre fluya correctamente. Si su trabajo le obliga a pasar muchas horas en la misma posición, procure alternar posturas, mover las piernas regularmente o utilizar un reposapiés para mejorar la circulación.

Consejo: Si trabaja en oficina, eleve sus piernas durante unos minutos varias veces al día. Si está de pie, cambie de posición y camine brevemente cuando pueda.

3. Controle su peso corporal

El sobrepeso o la obesidad ejercen presión adicional sobre las piernas y el sistema circulatorio. Mantener un peso saludable reduce la carga sobre las venas y mejora su funcionamiento.

Consejo: Una alimentación equilibrada y ejercicio frecuente son claves para mantener el peso adecuado y prevenir várices.

4. Alimente su cuerpo con nutrientes que favorezcan la circulación

Una dieta rica en frutas, verduras, legumbres y cereales integrales ayuda a mantener la salud vascular. Algunos alimentos contienen flavonoides, antioxidantes y fibra que refuerzan las paredes venosas y favorecen la circulación.

Alimentos recomendados:

  • Cítricos (naranja, toronja, limón)
  • Frutos rojos (arándanos, fresas)
  • Ajo y cebolla
  • Espinacas y acelgas
  • Nueces y almendras

Evite: Consumo excesivo de sal, azúcar, grasas saturadas y productos ultraprocesados.

5. Use ropa cómoda y evite prendas demasiado ajustadas

La ropa muy ajustada, especialmente en la zona de la cintura, ingles o piernas, puede dificultar el retorno venoso. Prefiera ropa que no restrinja el flujo sanguíneo y permita el movimiento libre.

Consejo: Evite usar fajas, pantalones extremadamente ceñidos y cinturones apretados por períodos prolongados.

6. Cuidado con los tacones altos

El uso frecuente de tacones puede afectar el funcionamiento del sistema venoso. Aunque no es necesario eliminarlos por completo, es recomendable alternarlos con zapatos más bajos y cómodos.

Consejo: Use tacones de altura moderada (menos de 5 cm) y alterne con calzado plano durante el día.

7. Eleve las piernas cuando descanse

Elevar las piernas por encima del nivel del corazón durante unos minutos al día favorece el retorno de la sangre al corazón y alivia la presión en las venas.

Consejo: Al llegar a casa, recuéstese en el sofá y ponga los pies en alto con ayuda de cojines o apoyos. Dormir con las piernas ligeramente elevadas también puede ser beneficioso.

8. Use medias de compresión si tiene predisposición o síntomas

Las medias de compresión están diseñadas para mejorar el retorno venoso y reducir la inflamación o molestias en las piernas. Son especialmente útiles para personas con antecedentes familiares de várices o que ya comienzan a presentar síntomas leves.

Importante: Consulte con un médico antes de usarlas para elegir el tipo y nivel de compresión adecuados.

9. Evite el calor excesivo

El calor dilata las venas y puede agravar los síntomas. Evite exposiciones prolongadas al sol, baños calientes o saunas si tiene predisposición a várices.

10. Hidratación y cuidado de la piel

Beber suficiente agua ayuda a mantener la elasticidad de los vasos sanguíneos. Además, masajear las piernas con cremas hidratantes puede estimular la circulación y aliviar la sensación de pesadez.